El presidente de Corea del Sur, Yoon Suk Yeol, ha pedido este sábado ‘disculpas sinceras por la ansiedad y las molestias’ causadas por la controversia generada tras la declaración de la ley marcial el martes 03 de diciembre.
Esta medida, que suscitó un intenso debate público, fue posteriormente derogada por el Parlamento surcoreano.
“La declaración de la ley marcial nació de la desesperación como presidente. Pido disculpas sinceras por la ansiedad y las molestias a la gente”, afirmó el mandatario, en unas declaraciones recogidas por la agencia de noticias surcoreana Yonhap.
En su mensaje, Yoon, de 63 años, aclaró a la sociedad surcoreana que ‘nunca habrá una segunda ley marcial’.
Asimismo, dejó claro que no va a evadir ‘la responsabilidad legal y política relacionada con la ley marcial’.
“Dejo en manos del partido descubrir cómo estabilizar la situación política, incluso durante mi mandato”, aseveró.
Yoon decretó el martes la ley marcial entre acusaciones políticas contra la oposición, que terminó haciendo valer su mayoría en la Asamblea Nacional para revertir la medida en cuestión de horas, ya de madrugada.
Yoon anunció la ley marcial en un inesperado discurso a la nación en el que acusó a la oposición de simpatizar con Corea del Norte después de que los opositores -que cuentan con la mayoría en el Parlamento- sacaran adelante una medida presupuestaria y presentaran mociones de destitución contra varios altos cargos.
Líder del PPP exige suspender a oon Suk Yeol tras polémica
El líder del gobernante Partido del Poder del Pueblo (PPP), Han Dong Hoon, exigió el día de ayer la suspensión inmediata de las funciones del presidente de Corea del Sur.
“Ante los hechos revelados recientemente, creo que es necesario suspender rápidamente las funciones del presidente Yoon Suk Yeol para proteger a la República de Corea y su pueblo”, declaró Han durante una reunión de emergencia de su formación en la sede del órgano legislativo.
Ayer, Han confirmó ‘con pruebas fidedignas’ que Yoon dio órdenes al comandante de contrainteligencia, Yeo In Hyung, de detener a figuras políticas importantes, incluyéndolo a él mismo y al dirigente del opositor Partido Demócrata, Lee Jae Myung.
