Tras el aplazamiento de la discusión sobre la reforma al Infonavit hasta febrero, el sector empresarial ha solicitado mantener a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) como un órgano vigilante para garantizar el uso transparente y equilibrado de los recursos de los trabajadores. 

Esperanza Ortega, presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), enfatizó que los empresarios se oponen a que el gobierno asuma el rol de constructor de vivienda, ya que esto podría desplazar la participación de la iniciativa privada y afectar el equilibrio en el sector. 

En conferencia de prensa, Ortega exhortó a los legisladores a evitar la aprobación de la reforma en “fast track”.

“Somos un órgano obligado de consulta, no somos asociaciones civiles y, en ese sentido, merecemos y tenemos el derecho de participar y levantar la voz por el bien de nuestros industriales y de los trabajadores”, destacó.

Además, señaló que las decisiones apresuradas del Congreso deben ser consensuadas con los organismos empresariales y los trabajadores. 

Ortega insistió en que cada reforma debe ser cuidadosamente estudiada y analizada en el Senado de la República y la Cámara de Diputados. “Que no hagan reformas fast track y que luego tengan consecuencias porque no fueron revisadas”, advirtió la líder de Canacintra. 

Ortega pide a los legisladores que las propuestas sean sometidas a parlamentos abiertos

La empresaria subrayó que tanto los industriales como los trabajadores aportan al Infonavit, por lo que el gobierno no puede implementar decisiones sin consultar a los sectores involucrados. Hizo un llamado directo a los legisladores para que las propuestas del Ejecutivo sean sometidas a comisiones y discutidas en parlamentos abiertos. 

“La responsabilidad de los legisladores es analizar cada iniciativa y evitar aprobarla únicamente porque proviene del Ejecutivo”, cuestionó Ortega, reafirmando la postura del sector empresarial en defensa de la transparencia y participación.