El expresidente argentino Alberto Fernández enfrenta una acusación formal de violencia de género hacia la ex primera dama Fabiola Yáñez, según determinó el juez federal Julián Ercolini. La denuncia detalla agresiones que habrían ocurrido durante ocho años, incluyendo el embarazo del hijo de la pareja.
De acuerdo con la resolución judicial, Fernández fue procesado como “autor penalmente responsable de los delitos de lesiones leves, agravadas por haberse cometido en un contexto de violencia de género y contra su pareja, reiteradas en dos oportunidades”. Además, se le imputaron “lesiones graves” y “amenazas coactivas” bajo las mismas circunstancias.
El magistrado también ordenó un embargo de 10 millones de pesos argentinos (aproximadamente 8,000 dólares) contra el exmandatario de 65 años, quien gobernó Argentina entre 2019 y 2023 como representante del peronismo.
Ercolini detalló que la violencia ejercida contra Yáñez incluyó “acoso, hostigamientos, controles, indiferencia, insultos, culpabilización, destrato, retiro de la palabra, ninguneos y hostilidad”, aprovechándose de una “relación asimétrica de poder” y la “situación de vulnerabilidad” en la que se encontraba la ex primera dama.
El juez agregó que, tras asumir la presidencia en 2019, las agresiones físicas habrían continuado y escalado cuando Yáñez quedó embarazada en 2021.
Según la resolución, estas incluyeron
“agarrones del cuello, zamarreos, cachetazos a mano abierta y golpes que provocaron lesiones en su cuerpo”.
Entre las pruebas presentadas en el caso se encuentran conversaciones de WhatsApp en las que Yáñez compartió imágenes de sus lesiones con la secretaria privada de Fernández, certificados médicos y testimonios de familiares y allegados que corroboran el maltrato.
El fallo subraya que ocho años de “agresiones psicológicas y físicas” habrían dejado “secuelas de daño psíquico” en Yáñez, afectando permanentemente su salud. En caso de ser hallado culpable, Fernández podría enfrentar hasta 18 años de prisión.
El exmandatario ha negado las acusaciones. “Jamás ejercí violencia física sobre Fabiola Yañez”, declaró a inicios de febrero al presentar un escrito ante el juez. Asimismo, argumentó que él fue quien sufrió agresiones en la relación y solicitó al magistrado su desvinculación del expediente, alegando una supuesta animosidad en su contra.
