Tras la publicación de los datos preliminares del Producto Interno Bruto (PIB) correspondientes al primer trimestre de 2025, la presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que la economía mexicana muestra señales de fortaleza y crecimiento, por lo que se descarta, al menos por ahora, una recesión.
Además, destacó que el llamado Plan México será una herramienta importante para sostener el dinamismo económico frente a un contexto global incierto.
De acuerdo con la estimación oportuna del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el PIB de México creció 0.2% entre enero y marzo. Aunque modesto, este avance superó ligeramente las expectativas del mercado, que anticipaban un crecimiento de apenas 0.1%, según un sondeo de Bloomberg.
Este resultado también desmiente los pronósticos más pesimistas, como el de Citi, que proyectaba una contracción de 0.4% para ese periodo. De haberse cumplido, México habría acumulado dos trimestres consecutivos de retroceso, lo que se considera una recesión técnica.
¿QUÉ SECTORES IMPULSARON LA ECONOMÍA?
El mayor dinamismo se observó en las actividades primarias, como la agricultura, que repuntaron 8.1% respecto al trimestre anterior —su mejor desempeño desde 2011.
En contraste, el sector industrial retrocedió 0.3%, sumando dos trimestres a la baja, mientras que los servicios, que representan alrededor del 63% del PIB nacional, se mantuvieron sin cambios.
En términos anuales, es decir, comparando con el primer trimestre de 2024, la economía mexicana creció 0.6%, según el reporte del INEGI.
FACTORES EXTERNOS JUGARON A FAVOR DEL CRECIMIENTO
Uno de los elementos que ayudaron a evitar la recesión fue el comportamiento de las exportaciones manufactureras, impulsadas por una mayor demanda anticipada desde Estados Unidos. Ante la posibilidad de nuevos aranceles impulsados por el presidente Donald Trump, muchos importadores estadounidenses adelantaron sus compras para evitar costos adicionales.
“Parece que el primer trimestre se salvó gracias a la concentración anticipada de la producción y las exportaciones ante un cambio en los aranceles de importación de Estados Unidos”, explicó Alberto Ramos, economista jefe para América Latina de Goldman Sachs.
No obstante, persiste el riesgo de que futuras medidas arancelarias por parte de Estados Unidos afecten negativamente las exportaciones mexicanas, especialmente si se concretan las amenazas de imponer tarifas recíprocas sobre más productos.