La presidenta Claudia Sheinbaum aclaró que los aranceles propuestos a autos importados de Asia no son una medida dirigida contra China o algún país en particular.

Manifestó que México busca mantener relaciones respetuosas y de buena cooperación con China.

Sheinbaum enfatizó que la medida aplica para todos los países con los que México no tiene un tratado de libre comercio, y que el objetivo principal es proteger la industria nacional.

¿Por qué incrementar los aranceles?

El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, explicó que los autos provenientes de Asia ya pagan un arancel del 20 %, pero que se elevará al 50 % para evitar que ingresen vehículos a precios muy por debajo del costo de referencia en México.

La medida forma parte de una reforma arancelaria mayor que abarca más de mil 400 fracciones arancelarias, con la intención de corregir desequilibrios comerciales.

Ebrard agregó que el cambio impulsa la inversión dentro de México, ya que ahora será menos atractivo importar autos si se encuentran por debajo de ciertos precios.

Reacción de China y respuesta diplomática

China expresó su rechazo ante la medida arancelaria, calificándola como restrictiva e injusta y advirtió sobre posibles daños al entorno empresarial y la cooperación bilateral.

El Ministerio de Comercio de China pidió que México actúe con cautela para no afectar la relación económica que ambas naciones han sostenido.

Sheinbaum respondió que ya hay canales diplomáticos abiertos para discutir el tema, incluyendo una comisión enviada a China previamente y reuniones con el embajador Chen Daojiang.

Se espera que la próxima semana representantes mexicanos mantengan pláticas con sus pares chinos y otros países afectados, como Corea del Sur, India, Indonesia, Rusia, Turquía y Tailandia.

Marco legal e implicaciones

La propuesta de elevar aranceles al 50 % aún debe pasar por el Congreso para su aprobación formal.

Sheinbaum indicó que la medida no viola normas de la Organización Mundial del Comercio, pues respeta los principios de no discriminación al aplicarse de manera uniforme a todos los países sin acuerdos comerciales.

El Plan México del gobierno plantea que esta política arancelaria sea parte de una estrategia más amplia de desarrollo económico, con fortalecimiento industrial, protección de empleo interno y fomento a la producción local.

Efectos esperados y posibles riesgos

El incremento arancelario podría generar un aumento en los precios de Algunos autos importados y refacciones, lo que podría afectar al consumidor final.

Por otro lado, se anticipa que este cambio favorezca la industria automotriz nacional, incentive la inversión en plantas locales y reduzca la dependencia de importaciones.

También podría abrir debates legales o diplomáticos si países afectados consideran que sus industrias resultan perjudicadas.