El presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, condenó con firmeza el ataque con misiles balísticos perpetrado por Rusia este domingo 13 de abril contra la ciudad nororiental de Sumy, que dejó al menos 32 muertos, incluidos dos menores de edad, y más de 80 personas heridas.
A través de sus redes sociales, el mandatario compartió estremecedoras imágenes del lugar del ataque, en el que se observan cuerpos cubiertos, vehículos en llamas y civiles heridos.
Zelensky exigió una respuesta inmediata y contundente de la comunidad internacional: “Moscú debe ser tratado como un terrorista. Las conversaciones nunca han detenido los misiles ni las bombas. Solo con presión se logrará la paz”, afirmó.
El ataque, ocurrió en pleno Domingo de Ramos, impactando una zona urbana de Sumy compuesta por casas, escuelas y autos.
“Necesitamos una fuerte respuesta del mundo. América, Europa, todos los que quieren que esta guerra y estas matanzas terminen”, expresó el presidente ucraniano, quien también señaló que sin acciones reales, Rusia continuará sembrando el terror en la región.
El bombardeo se dio dos días después de la visita del emisario estadounidense Steve Witkoff a Rusia, en un intento de Washington por acercar posiciones y buscar una salida diplomática al conflicto. Sin embargo, Moscú ha rechazado la propuesta de alto al fuego incondicional promovida por EE.UU., lo que ha generado críticas globales.
Líderes europeos, como el presidente francés Emmanuel Macron, se sumaron a las condenas al señalar que el ataque demuestra el “descarado desprecio de Rusia por las vidas humanas y el derecho internacional”. En tanto, el Consejo Europeo calificó la ofensiva como un “crimen de guerra”.
