Este viernes 18 de abril, el vicepresidente de Estados Unidos, J.D. Vance, aterrizó en Roma como parte de una breve pero significativa gira diplomática. 

Su agenda incluye encuentros con la primera ministra de Italia, Giorgia Meloni y con el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Pietro Parolin.

La visita de Vance se produce justo después del viaje de Meloni a Washington, donde fue recibida en la Casa Blanca por el presidente Donald Trump. Durante esa reunión, el mandatario elogió a la líder italiana por su firme postura en materia migratoria, calificándola como un nexo crucial entre Europa y Estados Unidos.

Agenda política de J.D. Vance en Italia: ¿Qué hará en Semana Santa?

Vance, quien participó en esa cita, se reunirá con Giorgia Meloni este viernes en Roma, y también tiene previsto asistir a las celebraciones de Pascua en el Vaticano durante el fin de semana.

Aunque no se ha anunciado un encuentro con el Papa Francisco, el trasfondo de la relación entre el pontífice y Vance ha captado la atención internacional. Francisco, de 88 años, se encuentra en recuperación tras un serio episodio de neumonía bilateral que ha limitado su actividad pública. 

Sin embargo, antes de su hospitalización, el pontífice criticó con firmeza los planes de deportación masiva impulsados por la Casa Blanca, advirtiendo que esas políticas atentan contra la dignidad humana.

El mensaje fue especialmente contundente en una carta dirigida a los obispos estadounidenses, en la que también pareció responder directamente a Vance. El vicepresidente, converso al catolicismo, ha defendido que su visión sobre inmigración es coherente con la doctrina de la Iglesia, postura que generó fricción con el Vaticano.

Pese a las diferencias, Vance ha dicho que respeta las opiniones del papa Francisco, pero reafirmó su compromiso con sus propias convicciones políticas.