La economía mexicana habría crecido, pese a anteriores proyecciones pesimistas, un ligero crecimiento de 0.2 por ciento en los primeros tres meses del presente año respecto al periodo inmediato interior, de acuerdo con información de la Estimación Oportuna del Producto Interno Bruto (PIB) llevada a cabo por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Este aumento es resultado de un dinamismo del sector agropecuario que habría experimentado un rebote de 8.1% en el periodo de enero a marzo de este año, después de un desplome de 8.5 puntos porcentuales en el último trimestre del año anterior.
Contrario a esto, el PID industrial habría sufrido una caída de 0.3 por ciento trimestral, luego de una caída de 1.5 puntos que reportó en el periodo anterior.
El sector de servicios se estancó al no tener una variación de enero a marzo, lo que representa su desempeño más bajo desde el tercer trimestre de 2021, cuando tuvo un retroceso de 1.3 por ciento.
En los primeros tres meses del 2025, con cifras originales, la Estimación Oportuna del Producto Interno Bruto experimentó un crecimiento a tasa anual de 0.8%, superior al 0.5% que reportó en el cuarto trimestre del año anterior.
Sobre divisiones económicas, fueron las actividades agropecuarias las que se apuntaron un incremento anual al registrar 6.4 puntos porcentuales y los servicios avanzaron 1.5%, mientras que el sector industrial tuvo una caída de 0.9% en el periodo de referencia.
Especialistas esperan un desempeño más modesto de la economía ante los riesgos de una menor inversión pública en infraestructura, así como al impacto de la política comercial que impulsó el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Gabriela Siller, directora de análisis económico y financiero de grupo Base, consideró que pese a estos ligeros repuntes el riesgo de recesión no ha desaparecido.
Aunque el PIB registró un crecimiento trimestral al comienzo del año esto se debió al rebote de las actividades primarias que son solamente 3.4% del PIB y este tiende a ser volátil.
Por otro lado, las actividades secundarias que muestran el mayor deterioro representan 33.4% del PIB y se encuentran en riesgo por todos los cambios que ha experimentado el comercio internacional, que se podrán observar en los próximos meses por la política arancelaria de Estados Unidos.
En cuanto las actividades terciarias, que son el 63.3 por ciento del PIB, tuvieron su primera caída trimestral desde el año 2021, y esto se debería al deterioro del mercado laboral que se observó desde 2024, el cual, según la especialista, podría agudizarse generando incertidumbre para empresas y hogares mexicanos.