La presidenta Claudia Sheinbaum anunció que insistirá en la extradición de Dámaso López Serrano, alias El Mini Lic, exintegrante del Cártel de Sinaloa que actualmente está detenido en Estados Unidos.

López Serrano es señalado como autor intelectual del asesinato del periodista Javier Valdez en 2017.

Durante su conferencia matutina, Sheinbaum fue cuestionada sobre las recientes versiones periodísticas que apuntan a que López Serrano firmó un nuevo acuerdo de cooperación con la fiscalía estadounidense, tras declararse culpable de conspirar para distribuir fentanilo ante la Corte del Distrito Este de Virginia.

En respuesta, la mandataria aclaró que México no desistirá de su solicitud de extradición.

“El Gobierno de Estados Unidos hizo un decreto hace poco llamando terroristas a algunas organizaciones de la delincuencia organizada. Ellos, en varias ocasiones, ha manifestado que no establecen negociación con estas organizaciones. Entonces, tiene que explicar por qué en estos casos se llega a acuerdos”.

‘El Mini Lic’: Colaboración con Estados Unidos y beneficios judiciales

Dámaso López Serrano fue detenido el 12 de diciembre de 2024 en Virginia, mientras se encontraba bajo arraigo domiciliario. 

En septiembre de 2022 había obtenido libertad condicional tras colaborar con las autoridades estadounidenses, proporcionando información sobre las operaciones del Cártel de Sinaloa.

La revelación del periodista Luis Chaparro, quien informó que El Mini Lic firmó un nuevo acuerdo con la fiscalía, reactivó la polémica en torno al trato que Estados Unidos otorga a miembros del crimen organizado que deciden cooperar.

Y no es el único caso. Otros dos integrantes del Cártel de Sinaloa, Joaquín y Ovidio Guzmán —hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán— también han llegado a acuerdos con las autoridades estadounidenses. Como resultado, Joaquín Guzmán no enfrentará la pena de muerte, pese a los cargos que se le imputan en la Corte Federal del Distrito Norte de Illinois.

En México, López Serrano es requerido por la justicia desde 2020, cuando la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad de Expresión obtuvo una orden de aprehensión en su contra por su presunta responsabilidad en el asesinato de Javier Valdez, periodista asesinado en Culiacán, Sinaloa.