En una elección que mantuvo en vilo a Polonia y atrajo la atención de toda Europa, el conservador Karol Nawrocki se impuso en la segunda vuelta presidencial celebrada este fin de semana, según confirmó este lunes el conteo final de votos.

Con un ajustado 50,89% frente al 49,11% del progresista Rafał Trzaskowski, alcalde de Varsovia, la victoria de Nawrocki refleja las profundas divisiones ideológicas de una nación estratégicamente situada en el flanco oriental de la OTAN y la Unión Europea.

La contienda fue tan cerrada que las primeras encuestas de salida del domingo auguraban un triunfo de Trzaskowski, una proyección que se revirtió a medida que avanzaba el escrutinio. El resultado marca el regreso al poder de una visión más nacionalista y populista, respaldada abiertamente por el expresidente estadounidense Donald Trump.

UN CAMBIO DE RUMBO CON RESONANCIA INTERNACIONAL
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, felicitó a Nawrocki destacando el papel crucial de Polonia como aliado estratégico y “pilar de la seguridad regional y europea” y subrayando la importancia de la cooperación bilateral, especialmente en el contexto de la guerra en Ucrania y el tránsito de armas occidentales a través de territorio polaco.

Desde Hungría, el primer ministro Viktor Orbán celebró la “fantástica victoria” de Nawrocki, alineándose con la visión conservadora que ambos comparten. En contraste, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ofreció una felicitación medida, centrada en la necesidad de continuar la colaboración basada en los valores democráticos comunes:

“Trabajemos para asegurar la seguridad y prosperidad de nuestro hogar común”, declaró.

UNA PRESIDENCIA CON PESO POLÍTICO
Aunque el primer ministro ostenta el poder ejecutivo en el sistema político polaco, el presidente tiene competencias relevantes, especialmente en política exterior y en el veto de leyes.

Nawrocki, quien asumirá el cargo el próximo 6 de agosto en reemplazo del también conservador Andrzej Duda, tendrá un mandato de cinco años, con posibilidad de reelección.

EL SURGIMIENTO DE UN ROSTRO NUEVO
Historiador de 42 años, exboxeador aficionado y novato en política, Karol Nawrocki fue elegido por el partido Ley y Justicia (PiS) como la figura que podría renovar la imagen del conservadurismo en Polonia.

Tras haber perdido el poder en 2023 ante una coalición centrista liderada por Donald Tusk, el PiS apostó por una figura menos asociada con los escándalos del pasado. La estrategia dio frutos: Nawrocki logró movilizar tanto a la base tradicional como a nuevos votantes atraídos por su perfil independiente y fresco.