Irán exhortó este martes a su población a desinstalar la famosa aplicación WhatsApp, acusándola de recopilar información de usuarios iraníes para enviarla a Israel. Sin embargo, no se presentaron pruebas que respaldaran la acusación.

Ante el señalamiento de la televisión estatal iraní, WhatsApp, propiedad de Meta Platforms, desmintió categóricamente las afirmaciones. En un comunicado, la compañía expresó lo siguiente: 

“Nos preocupa que estos informes falsos sean una excusa para que nuestros servicios sean bloqueados en un momento en que la gente más los necesita”.

Meta recalca que WhatsApp es bastante seguro de utilizar

WhatsApp enfatizó que su plataforma utiliza cifrado de punta a punta, lo que garantiza que solo el remitente y el receptor pueden leer los mensajes. 

“No rastreamos tu ubicación precisa, no mantenemos registros de con quién se está mensajeando cada uno y no rastreamos los mensajes personales que las personas se envían entre sí. No proporcionamos información masiva a ningún gobierno”, añadió la empresa.

El cifrado de punta a punta implica que, incluso si un tercero interceptara una comunicación, esta sería indescifrable sin la clave adecuada, debido a que el contenido está completamente codificado.

Irán vs. las redes sociales

Esta no es la primera vez que Irán toma medidas contra plataformas digitales. A lo largo de los años, el país ha bloqueado el acceso a diversas redes sociales. 

En 2022, durante las protestas por la muerte de una joven detenida por la policía de la moral, el gobierno prohibió el uso de WhatsApp y Google Play. Sin embargo, esa medida fue revertida a finales de 2023.

Pese a las restricciones, millones de iraníes continúan accediendo a servicios bloqueados mediante el uso de proxies y redes privadas virtuales (VPNs). WhatsApp, junto con Instagram y Telegram, ha sido históricamente una de las herramientas de comunicación más utilizadas por la población iraní