La Secretaría de Marina, en coordinación con Sedena, Guardia Nacional y FGR, realizó un operativo en las costas de Guerrero que resultó en la incautación de 601 kilos de cocaína transportados en una embarcación menor.
La tripulación fue detenida y puesta a disposición del Ministerio Público.
Pérdidas al crimen organizado
Este segundo golpe se suma a un decomiso previo de 900 kilos de cocaína, elevando la pérdida estimada para los grupos criminales a casi 140 millones de pesos.
Los paquetes de droga estaban cuidadosamente embalados, lo que refleja la sofisticación de las rutas marítimas utilizadas por los cárteles para traficar drogas hacia diferentes destinos.
Operativo coordinado
La acción se realizó con patrullajes marítimos y vigilancia aérea, lo que permitió detectar y asegurar la embarcación antes de que lograra evadir a las autoridades.
Desde el inicio de la actual administración, los operativos en alta mar han resultado en más de 46 toneladas de cocaína aseguradas, fortaleciendo la estrategia federal contra el narcotráfico.
Impacto en las finanzas criminales
El decomiso no solo representa una pérdida millonaria para los cárteles, sino que también envía un mensaje sobre la capacidad de respuesta del Estado frente a las rutas de tráfico ilícito.
Estas medidas buscan disuadir nuevas operaciones marítimas y mantener la presión sobre las organizaciones criminales.