Esta semana, la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) fijó postura tras el llamado del senador republicano Ted Cruz, quien instó al Gobierno de México a aceptar el apoyo de Estados Unidos en el combate a los cárteles del narcotráfico.

Desde la Embajada de Estados Unidos en México, Cruz respaldó la propuesta del presidente Donald Trump, señalando que un modelo similar al “Plan Colombia” podría ser una solución efectiva para garantizar la seguridad en ambos países.

“Mi mensaje al Gobierno de México es: acepten nuestro ofrecimiento como amigos, justo como lo hizo Colombia con el ‘Plan Colombia’. Acepten nuestra oferta como socios, mano a mano, vamos a sacar a los cárteles y eso garantizará la seguridad para los estadounidenses y también para los mexicanos”.

El republicano reconoció que México busca proteger su soberanía, pero subrayó que para Washington también es un tema prioritario. 

“En los Estados Unidos también nos preocupa nuestra soberanía y, en mi opinión, preferiría que nuestros gobiernos fueran socios porque tenemos un objetivo compartido”.

¿Cuál fue la respuesta de México?

Ante estas declaraciones, la cancillería mexicana recordó que la Constitución y las leyes nacionales establecen de manera clara que las autoridades mexicanas son las únicas responsables de la seguridad en el territorio nacional.

En un comunicado, la SRE destacó que México y Estados Unidos mantienen una “buena cooperación” en materia de seguridad, siempre con base en la legislación mexicana y los tratados internacionales. El texto detalla que la colaboración debe sustentarse en principios de responsabilidad compartida, confianza mutua, pleno respeto a las soberanías y cooperación sin subordinación, tal como lo ha señalado la presidenta Claudia Sheinbaum.

Asimismo, la dependencia puntualizó que en la reunión entre Cruz y el canciller Juan Ramón de la Fuente se dejó claro que todos los acuerdos con Washington parten del respeto a la soberanía de México.

Durante el encuentro también se abordaron otros temas de la agenda bilateral, como los avances en seguridad, la relación económica, la distribución de agua del río Bravo y las negociaciones sobre el impuesto al jitomate mexicano.