Este 2 de mayo, la presidenta Claudia Sheinbaum y el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, anunciaron con entusiasmo un importante avance en la relación comercial entre México y Estados Unidos: la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) ha confirmado la eliminación de aranceles y la aplicación de tarifas preferenciales a las autopartes mexicanas exportadas al país vecino.
Según explicó Ebrard, esta medida representa “un gran avance y mejores condiciones” para la industria mexicana. Además, señaló que es resultado de nuevos acuerdos con el gobierno del presidente Donald Trump y con el Departamento de Comercio estadounidense, encabezado por el secretario Howard Lutnick.
“El día de ayer se publicaron instrucciones a las autoridades aduanales de Estados Unidos, y ahí se refrenda y se ratifica que las autopartes en México, también lo serán para Canadá, tienen nuestro tratado (T-MEC) y, por lo tanto, no pagan aranceles. Van a ser consideradas como si fueran de Estados Unidos”, detalló Ebrard.
Sheinbaum añadió que esta decisión está respaldada por una revisión específica de las llamadas “reglas de origen” establecidas en el Tratado México–Estados Unidos–Canadá (T-MEC). Estas reglas obligan a priorizar productos elaborados dentro del bloque comercial de América del Norte, lo que beneficia directamente a los fabricantes de la región.
“En vehículos y autopartes se ha dado un trato preferencial a todo aquello que se produce dentro del tratado (T-MEC); en particular, las autopartes siguen teniendo cero arancel, entonces esa es la situación que tenemos ahora”.
Continúan los aranceles sobre el aluminio y el acero: Sheinbaum
En su conferencia matutina de este viernes, la mandataria también advirtió que no todos los sectores han recibido el mismo trato: los aranceles al acero y al aluminio permanecen vigentes. Estos materiales siguen sujetos a medidas restrictivas impuestas de forma generalizada por la administración de Donald Trump.