El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, reconoció como “un error” el ataque militar a la iglesia católica de la Sagrada Familia en Ciudad de Gaza, ocurrido el 17 de julio de 2025.

La información fue confirmada por la Casa Blanca, luego de una llamada entre Netanyahu y el presidente estadounidense Donald Trump.

“Fue un error de los israelíes atacar esa iglesia católica”, informó Karoline Leavitt, portavoz de Trump, en conferencia de prensa.

¿Cómo respondió el gobierno israelí?

La oficina de Netanyahu emitió un comunicado lamentando el incidente:

“Israel lamenta profundamente que un disparo fortuito alcanzara la iglesia de la Sagrada Familia. Cada vida inocente perdida es una tragedia”.

El Ejército israelí también expresó su pesar por los daños y las víctimas, aunque sin asumir responsabilidad directa por las muertes reportadas.

Según el Ministerio de Sanidad de Gaza, el bombardeo causó cuatro muertes, mientras que el Patriarcado Latino de Jerusalén reportó dos fallecidos.

Entre los heridos se encuentra el sacerdote argentino Gabriel Romanelli, quien recibía llamadas diarias del papa Francisco hasta su fallecimiento en abril.

¿Por qué el ataque ha causado indignación?

La iglesia atacada albergaba a unas 600 personas desplazadas, en su mayoría niños. El Patriarcado Latino calificó el bombardeo como una “violación flagrante de la dignidad humana” y de las leyes internacionales sobre protección de lugares religiosos durante conflictos armados.

El papa León XIV, el presidente francés Emmanuel Macron, el secretario general de la ONU Antonio Guterres y el gobierno español condenaron el ataque y exigieron el respeto a los lugares sagrados.

Diversas voces internacionales han pedido un alto el fuego inmediato en Gaza. “La continuación de esta guerra es injustificable”, declaró Macron.

Por su parte, la ONU y organizaciones humanitarias insisten en la necesidad urgente de proteger a los civiles y los sitios de culto en medio del conflicto.