Berlín dio este viernes un giro inesperado en su postura frente a la guerra en Gaza.
El canciller alemán, Friedrich Merz, anunció que su gobierno no autorizará “hasta nuevo aviso” ninguna exportación de material militar que pueda ser utilizado en la Franja, en reacción directa a la decisión del gabinete de Benjamin Netanyahu de tomar la Ciudad de Gaza.
La medida, una de las respuestas más rápidas y contundentes de un aliado cercano de Israel, marca un punto de quiebre en la política alemana, que hasta ahora había evitado sanciones o restricciones como las aplicadas por otros socios de la Unión Europea.
Analistas señalan que esta decisión podría aislar aún más a Israel en el escenario internacional, donde ya enfrenta críticas de Naciones Unidas y de defensores de los rehenes.
En un comunicado, Merz subrayó que Israel “tiene derecho a defenderse del terror de Hamás”, pero advirtió que la liberación de los rehenes y un alto el fuego en la guerra de 22 meses “son nuestra máxima prioridad”. También fue enfático en que Hamás “no debe tener ningún papel en el futuro de Gaza”.
El canciller reconoció que la reciente ofensiva israelí complica alcanzar esos objetivos.
“Bajo estas circunstancias, el gobierno alemán no autorizará ninguna exportación de material militar que pueda ser utilizado en la Franja de Gaza hasta nuevo aviso”, señaló.
Además, expresó su “profunda preocupación” por el sufrimiento de la población civil y urgió a Israel a permitir el acceso sin restricciones de ayuda humanitaria, incluidas agencias de la ONU y ONG.
Berlín también pidió a Netanyahu evitar cualquier paso hacia la anexión de Cisjordania.
No se ha especificado qué equipos militares alemanes quedarán afectados por la medida. Alemania, marcada por su historia y por el Holocausto, ha sido uno de los defensores más firmes de Israel en Occidente.
Sin embargo, el gobierno de Merz no secundó la reciente postura del presidente francés Emmanuel Macron ni del primer ministro británico Keir Starmer, quienes planean reconocer oficialmente un Estado palestino en septiembre.