Este miércoles, Rusia utilizó bombas planeadoras y artillería para atacar la ciudad de Jersón, en el sur de Ucrania, dejando un saldo de una persona sin vida y al menos cinco heridas.
El jefe de la administración regional, Oleksandr Prokudin, explicó que los bombardeos comenzaron en la mañana y que, poco después de que los equipos de emergencia arribaran al lugar, las tropas rusas iniciaron una nueva descarga con artillería pesada.
“Esta es una táctica deliberada de Rusia para obstaculizar el rescate de los heridos y causar daños a médicos, rescatistas y policías”, denunció Prokudin.
El ataque dañó una instalación deportiva, un supermercado, edificios residenciales y varios vehículos civiles.
Este episodio se produce tras una serie de ataques particularmente letales en los últimos días. El Domingo de Ramos, dos misiles balísticos impactaron en la ciudad nororiental de Sumy, cerca de la frontera rusa, dejando 35 muertos y más de 100 heridos, en lo que se considera la operación más mortal contra civiles ucranianos en lo que va del año.
Moscú afirmó, sin presentar pruebas, que el blanco era una reunión de altos mandos militares ucranianos.
Todo esto ocurre pese al acuerdo alcanzado el mes pasado entre Rusia y Ucrania para una tregua parcial de 30 días centrada en instalaciones energéticas. Ambas partes se acusan mutuamente de violaciones constantes, y las diferencias sobre cuándo y cómo deben cesar los ataques siguen sin resolverse.
Consultado este miércoles sobre el futuro del alto al fuego una vez finalizado el plazo, el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, evitó dar una respuesta clara y dijo que la decisión se tomará más adelante. Moscú, además, ha rechazado la propuesta de un alto el fuego integral promovida por el presidente estadounidense Donald Trump y apoyada por Ucrania, condicionando cualquier avance a la suspensión del reclutamiento ucraniano y del envío de armamento occidental, demandas que Kiev ha rechazado tajantemente.
Sobre el terreno, las tropas rusas continúan ganando terreno en varios sectores del frente, que se extiende por más de mil kilómetros. Las autoridades ucranianas advierten que Moscú podría estar preparando una nueva ofensiva para reforzar su posición en eventuales negociaciones.
Mientras tanto, el ejército ruso aseguró haber derribado 26 drones ucranianos en distintas regiones del país durante la madrugada de este 16 de abril.