¿La inteligencia artificial está controlando a los más jóvenes? Ese es una de las preocupaciones que expuso el papa León XIV durante una conferencia sobre la IA y la ética en el Vaticano.
La irrupción de nuevas tecnologías inteligentes ha despertado inquietudes dentro de la Iglesia católica, ante el temor de que estas innovaciones contribuyan al distanciamiento de los jóvenes respecto a la fe y a Dios.
¿Qué le está haciendo la IA a la juventud?
En un mensaje enviado este viernes, el pontífice alertó sobre los potenciales efectos negativos que la IA podría tener en el desarrollo intelectual, neurológico y espiritual de niños y jóvenes.
“Todos nosotros, estoy seguro, estamos preocupados por los niños y los jóvenes, y las posibles consecuencias del uso de la IA en su desarrollo intelectual y neurológico. El bienestar de la sociedad depende de que se les brinde la habilidad de desarrollar los dones y capacidades que Dios les ha otorgado”, comentó, añadiendo que el acceso a datos no debe confundirse con verdadera inteligencia.
El poder de la IA en la agenda de León XIV
León XIV, el primer papa originario de Estados Unidos, ha señalado la IA como una de las prioridades de su pontificado. A través de su mensaje, deja ver la preocupación de la Santa Sede sobre el impacto de las nuevas tecnologías en la dignidad humana.
El pontífice insistió en que cualquier avance tecnológico debe regirse por un “criterio ético superior”, orientado a proteger la dignidad de cada ser humano y respetar la diversidad cultural y social del mundo. Según él, las nuevas generaciones están especialmente expuestas, pues “nunca antes han tenido un acceso tan inmediato y constante a la información”.
“Al final, la auténtica sabiduría tiene más que ver con reconocer el verdadero significado de la vida, que con la disponibilidad de datos”.
El nuevo Papa evocó además la figura de León XIII, su homónimo, quien a finales del siglo XIX se convirtió en una voz crucial durante la Revolución Industrial al exigir el respeto por la dignidad y los derechos de los trabajadores.
De forma similar, León XIV ve en la inteligencia artificial una transformación de época que requiere respuestas éticas y sociales firmes.
Su antecesor, el papa Francisco, también mostró una creciente inquietud por el desarrollo de la IA en los últimos años de su pontificado. Incluso propuso un tratado internacional que regule su uso y pidió a los líderes políticos que se aseguren de que las decisiones fundamentales, especialmente aquellas relacionadas con la vida y la muerte, nunca sean delegadas a máquinas.