La presidenta Claudia Sheinbaum se ha pronunciado en contra de la pena de muerte, luego de que Estados Unidos notificara su decisión de no buscar esta medida contra Ismael “El Mayo” Zambada, Vicente Carrillo Fuentes, alias “El Viceroy”, y Rafael Caro Quintero, tres de los narcos más conocidos de México.
Al ser cuestionada sobre la postura del gobierno mexicano ante esta nueva disposición del Departamento de Justicia estadounidense, Sheinbaum dejó en claro en su conferencia de prensa que:
“Nosotros estamos en contra de la pena de muerte, no importa el delito. No es algo con lo que coincidimos”.
Al final, es una decisión de Estados Unidos
La mandataria aclaró que si bien México busca que se respete el principio de reciprocidad en los tratados de extradición —lo que impide la imposición de la pena capital a connacionales extraditados—, las decisiones judiciales en estos casos corresponden únicamente a Estados Unidos.
“No participamos en estas decisiones. Es una decisión de Estados Unidos”, puntualizó.
Sheinbaum se pronunció un día después de que el Departamento de Justicia estadounidense notificara oficialmente al juez Brian M. Cogan, de la Corte del Distrito Este de Nueva York, que no solicitará la pena de muerte para Ismael “El Mayo” Zambada, uno de los fundadores del Cártel de Sinaloa.
El capo enfrenta 17 cargos federales, incluidos narcotráfico, lavado de dinero, tráfico de armas y homicidio.
La notificación, firmada por el fiscal Joseph Nocella Jr. y avalada por la fiscal general designada, Pamela Bondi, ha sido interpretada como una posible vía para negociar un acuerdo judicial entre la defensa del capo y las autoridades estadounidenses, evitando así un juicio prolongado.
No es la primera vez que esto pasa
En años recientes, el gobierno estadounidense también ha optado por no aplicar la pena de muerte en los casos de Rafael Caro Quintero, exlíder del Cártel de Guadalajara, y Vicente Carrillo Fuentes, del extinto Cártel de Juárez, revelando una tendencia hacia la búsqueda de acuerdos judiciales en vez de enfrentar largos procesos con potencial de pena de muerte.